El pez gruñón corrió de nuevo

Por Juan Ignacio Pérez, el 28 octubre, 2015. Categoría(s): General ✎ 10
Pez gruñón (Leuresthes tenuis) (Créditos: Eric Wittman; Wikipedia)
Pez gruñón (Leuresthes tenuis) (Foto: Eric Wittman; Wikipedia)

El escritor estadounidense Charles Bukowski, en su libro de poemas «Mockingbird Wish Me Luck» (1972), cita al pez gruñón (Leuresthes tenuis) en dos ocasiones. En uno de los poemas, titulado The hunt, dice lo siguiente:

and the grunion ran again

through the oily sea

to plant eggs on shore and be caught

by unemployed drunks

with flopping canvas hats

and no woman at all.

Bukowski, en ese poema, utilizó la palabra “ran”, que es el pasado del verbo correr, porque ese pez corre o anda por encima de la arena. No lo hace siempre, ya que ese no es su modo de vida, pero como puede leerse en el poema, sale del agua a poner los huevos (to plant eggs on shore). Se trata de un comportamiento asombroso, pues es el único pez que pone sus huevos fuera del agua.

Entre dos y seis días después de la luna nueva y la luna llena, y aprovechando el empuje de una ola, salen del agua. Luego se alejan todo lo que pueden del borde del mar. La hembra, mantiene la cabeza mirando hacia arriba mientras hace un agujero en la arena con la cola. La arena está mojada y no le cuesta demasiado hacer ese trabajo de perforación; se introduce en el agujero hasta las aletas pectorales. A continuación pone los huevos en el interior del agujero, donde quedan a 10 cm de la superficie. Un buen número de machos, -pueden ser hasta ocho-, se le acercan y liberan allí sus espermatocitos. Completada la freza (suelta de gametos) los machos vuelven en seguida al agua, y la hembra se queda esperando a la siguiente ola; cuando llega, sale del agujero y vuelve también al agua. Los peces gruñones más rápidos completan todas estas operaciones en 30 segundos, pero también puede ocurrir que lleguen a estar varios minutos fuera del agua.

Como se puede suponer, los peces gruñones respiran, como la mayoría del resto de los peces, por las branquias. Por eso, y dado que las branquias colapsan fuera del agua, durante el tiempo que permanecen sobre la arena, no se produce intercambio respiratorio alguno, por lo que se encuentran bajo condiciones de hipoxia. Podría pensarse que se trata de muy poco tiempo, por lo que esas condiciones de hipoxia no supondrían ningún inconveniente. Sin embargo, dado que se trata de animales muy pequeños, su tasa metabólica es alta. Por esa razón no es sorprendente que presente la misma respuesta a la hipoxia que la que se produce en otras especies. Veamos en qué consiste esa respuesta.

Los mamíferos marinos, cuando se sumergen, utilizan los que podrían considerarse como dos depósitos de oxígeno, un alto número de glóbulos rojos, por un lado, y la mioglobina muscular, que en esos animales presenta una concentración muy alta, por la otra. A pesar de disponer de esos dos depósitos, lo cierto es que se encuentran en una situación limitante, puesto que sin tener acceso al oxígeno atmosférico, podrían llegar a agotarse los depósitos internos. Por esa razón los mamíferos marinos adoptan tácticas de ahorro de oxígeno para evitar un excesivo gasto. Modifican de dos maneras diferentes el funcionamiento del sistema circulatorio. Por un lado recurren a la bradicardia; esto es, reducen muy sensiblemente la frecuencia cardiaca. Y por otro lado, limitan de forma considerable la circulación periférica, cerrando numerosos vasos sanguíneos de la periferia corporal. De ese modo, el corazón ha de trabajar mucho menos y no se transporta oxígeno a aquellos órganos en los que no es imprescindible. El aporte de oxígeno al cerebro está garantizado, por supuesto, así como a los músculos con los que nadan, pero en conjunto, el consumo de oxíigeno se reduce de forma notable.

El pez gruñón responde del mismo modo cuando sale del agua. Al fin y al cabo, estos también, cuando se encuentran expuestos al aire, sufren condiciones de hipoxia, y por lo que podemos ver, a la hipoxia responden del mismo modo unos y otros, los de origen terrestre cuando se sumergen y los de origen acuático, cuando salen del agua. Por cierto, los peces voladores responden del mismo modo, pero el tiempo em que se encuentran fuera del agua es mucho menor.

 



10 Comentarios

    1. Gracias KI
      Efectivamente no es la misma especie. De hecho no tienen nada que ver. El que citas es uno de los peces que respiran en aire. Hay muchos, y utilizan mecanismos diferentes. Abundan en zonas en las que sufren sequías que llegan a secar los lechos de los ríos, y también los hay que migran de un río a otro gracias a ese mecanismo. Hay anguilas que lo hacen, por ejemplo.
      Salud

      1. Sip, entre otras especies de peces, soy feliz poseedor de varias corydoras, que también tienen respiración atmosférica. La verdad es que es apasionante ver cómo la selección natural explora todo el espacio de soluciones de los mismos problemas 😀
        Saludos

  1. Hola. He leído que hay un género de peces que no tienen hemoglobina sino que transportan el oxígeno disuelto directamente en la sangre. Entonces ¿para qué necesitamos nosotros los glóbulos rojos? Si la causa es que el oxígeno no se disuelve bien en la sangre ¿cómo es que los glóbulos rojos pueden tomarlo de los capilares de los pulmones?

    1. Hasta donde yo sé, los únicos peces sin pigmentos respiratorios son estos dracos: https://zoologik.naukas.com/2014/11/05/peces-translucidos/
      Nuestra temperatura corporal y nivel de actividad no nos permitirían vivir sin pigmentos respiratosrios.
      Lo que hace la hemoglobina es albergar muchísimo oxígeno, una cantidad tal que no podría albergar en forma disuelta. Para hacernos una idea, la sangre oxigenada tiene una concentración de O2 combinado que es un 20% (en volumen, o sea, 20 ml de O2 por 100 ml de sangre), mientras que en forma disuelta no tiene más a llá de 0,6 %. La transferencia no es ningún misterio. Podría decirse que desde los glóbulos rojos «succionan» el oxígeno; en el plasma sólo está de paso.

      1. Gracias, a esos peces me refería.

        Mmm, siguen sin cuadrarme las cosas. Los glóbulos rojos toman el oxígeno de la sangre de los pulmones, no directamente del aire, y la cantidad de oxígeno que pasa del aire a la sangre depende de lo fácil que se disuelva éste en la sangre, ¿no? Entonces, por mucha capacidad que tengan los glóbulos rojos, es como si intentas suministrar agua a un canal con un grifo. Por muy ancho que hagas el canal, el flujo seguirá siendo una mierda. ¿O me he perdido algo?

        1. No sé si te has perdido algo, pero el símil que utilizas del canal y su anchura no vale en este caso. Lo intentaré.
          Un pigmento respiratorio funciona porque tiene alta afinidad por el oxígeno. Dada una determinada tensión parcial de oxígeno, el pigmento alberga mucho más del que puede encontrarse en forma disuelta. En los capilares pulmonares el pigmento extrae el oxígeno de la fracción disuelta. No importa que haya poco O2 en forma disuelta; lo que importa es que lo que se disuelve pasa inmediatamente al pigmento. Dado que éste lo retira de la fracción disuelta, entre la sangre y el aire que entra en los pulmones se mantiene un gradiente de tensiones parciales que favorece la transferencia desde el exterior. Hipotéticamente podría llegarse a un equilibrio de tensiones parciales y cesar la transferencia, pero eso no ocurre nunca porque al renovarse la sangre de forma continua, siempre está llegando sangre desoxigenada a los capilares pulmonares, lo que hace que la transferencia no cese. Repito que la analogía del canal y el grosor no sirve aquí. No hay un canal de un grosor determinado, lo que hay son diferentes fracciones entre las que se produce transferencia debido a la existencia de diferentes tensiones parciales.

          1. Muchas gracias, ahora lo entiendo. Resumiendo, que el hecho de que la cantidad de oxígeno necesaria para saturar la sangre sea pequeña no implica que la velocidad con que éste pasa del aire a una sangre sin oxígeno sea pequeña.

          2. En efecto. De hecho, en fisiología pigmentaria se utilizan dos indicadores del funcionamiento de los pigmentos respiratorios, uno es la capacidad (el volumen de oxígeno que puede albergar el pigmento cuando está saturado) y el otro es la afinidad por el oxígeno, que indica la facilidad con que el oxígeno se combina con aquél.

  2. dichos pigmentos respiratorios toman O2 en grandes cantidades y a altas velocidades, las mitocondrias estarian robandoles oxigeno que necesitan transportar, entonces las desechan celularmente los eritrocitos para dejando de respirar lograr que el resto de las celulas incorporen el torrente oxigenico, la llave maestra es el hierro y la enfermedad que todo lo complica la anemia falciforme
    http://francis.naukas.com/2015/10/14/la-anemia-falciforme-la-importancia-de-un-solo-nucleotido/
    el asunto: somos de sangre caliente y no podemos con mitocondrias a cuestas alli. Creo entender.
    Ergo, nos despigmentamos y morimos, que eso hacen las guerras por nosotros cuando derramamos la sangre del otro.

Deja un comentario

Por Juan Ignacio Pérez, publicado el 28 octubre, 2015
Categoría(s): General